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Preguntado por Teresa a Daniel, guardiolajavi, Lucio, Nuria, Paula el 4 Nov 2016. Esta pregunta también fue realizada por Pablomiba.
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Fco. Javier Martinez Guardiola contestada el 4 Nov 2016:
Nunca es tan malo como lo pintan. Eso sí, es todo mérito de los profesionales que están haciendo de profesores en todos lo niveles. Y estaría bien que lo dejasen durante un periodo largo tranquilo sin tantos cambios. Que dejen innovar a los profesores, y creo que hay demasiada materia para aprender. Salís muy preparados. Y de la universidad sale gente muy buena, para destacar siempre hay que trabajar mucho, pero hay gente muy brillante a la que el sistema educativo que sea no le ha impedido estar al máximo nivel en Europa, por no decir del mundo.
Ahora, todo es mejorable, pero para mejorar hay que hacer un gran consenso con todos los implicados.
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Nuria Benavent contestada el 5 Nov 2016:
Sobre el sistema de educación actual pienso que no deberían estar cambiándolo cada dos por tres. Los cambios tan seguidos solo pueden producir descontrol entre los profesores y alumnos que al final no saben bien cómo hacer las cosas.
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Paula Ruiz Hueso contestada el 5 Nov 2016:
Creo que es mejorable pero que hay profesores muy buenos con ganas de enseñar y motivaros con diferentes herramientas. El problema es que nuestros políticos no son capaces de ponerse de acuerdo para mejorarlo entre todos, por lo que con cada cambio de legislatura se modifican muchas cosas pero no se avanza. Se necesita estabilidad y que dejen de utilizarlo como arma para ganar votos.
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Daniel Pastor Galan contestada el 6 Nov 2016:
El sistema español no es malo. La mayoría de los profesores son muy buenos trabajadores y se preocupan por los alumnos un montón. Y lo digo por experiencia que mi padre es profesor de instituto.
Pero hay dos problemas muy serios. El primero es la financiación. En Finlandia dedican un 8% del presupuesto a educación y en España el 4%. ¿Os imagináis cómo sería vuestro instituto con el doble de dinero? Pues habría más profesores, más recursos didácticos como laboratorio u ordenadores y menos alumnos por clase. Tendríais más atención, y eso al final significa que aprenderíais más con menos esfuerzo.
El segundo problema es que los profesores se encuentran cada dos por tres con cambios en el sistema. Que si reválida ahora, que si luego no. Que si filosofía en segundo de bachillerato que si no. Al final les toca dedicar tiempo a esas cosas en lugar de a estar pendiente de sus estudiantes. Los políticos tienen que ponerse de acuerdo de una vez y diseñar un sistema estable y bien financiado.
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